La puesta de sol lleva desde amarillo
a violeta, pasando por rojos y naranjas. Cuando solo quedan segundos
de luz, las montañas unifican sus tonos y pierdes la percepción de
profundidad.
Hoy hace menos calor que otros días y
esta ligera brisa nos refresca un poco más.
Esta sensación la he tenido mas
veces, paisajes e imágenes que no valoras en tu día a día, lo
observamos de maniobras en España y aquí en Afganistán. Disfrutas
y es como si estuvieses en casa o de vacaciones(si no fuera por el
peso del equipo o los mil ojos que tienes que tener).
Me he dicho muchas veces que
disfrutare de estos momentos en mi tiempo libre, la diferencia, es
que hoy cuando lo dije, me lo creí. Me niego a dejas pasar estas
postales inmortales, que al final es lo que recuerdas y sonríes en
un negro día.
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